Querida Juana...

Grupo Erein


Querida Juana. 

Te escribimos esta carta en tiempos de pandemia. El Covid-19 nos ha dado un revolcón, nos ha descolocado. Hemos pasado de una exterioridad extrema (siempre trabajando, saliendo, viajando...) a una interioridad forzada. El Covid-19 nos ha sometido a TODOS a una noche oscura colectiva...y ,como tú bien sabes, sólo la experiencia personal de Dios en el silencio y la oración nos permitirá comprender, ahora mejor que nunca, que nosotros también tenemos que "tender la mano". Nos ha puesto ante una nueva realidad, que la tendremos que leer bien y asumir compromisos solidarios. A retos y problemas nuevos, respuestas y decisiones también nuevas y generosas.

En este momento histórico y en este mundo globalizado éste es uno de los signos de nuestros tiempos. La vulnerabilidad se hace presente y toca a nuestras puertas con un encargo muy nítido: "esto lo asumimos todas y todos y respondemos como comunidad, como gran comunidad, o nos vienen tiempos difíciles".

Los procesos de humanización en tiempos de incertidumbre como los que estamos viviendo requieren de movimientos sociales amplios y potentes que orienten la vida de los pueblos, que animen las comunidades.

El mundo del cuidado, de la atención de unos a otros, de apertura y de generosidad, que tan clara y concretamente se ha transparentado en estas semanas últimas, es un buen camino a desarrollar, es un buen sendero humanizador que tiene que tener una concreción en las decisiones que se vayan tomando en el campo social, económico, educativo y cultural, sanitario, político, laboral, tecnológico......

Juana, en estos días un tanto confusos se está repitiendo mucho eso de que nadie quede excluido. Tú ya sabías algo de esto, y aquí estamos de nuevo con el mismo asunto y la misma problemática. La historia se repite.

No son tiempos de retórica, sino de ir haciendo procesos eficaces en los diferentes ámbitos en los que toca vivir (familia, comunidad, pueblo, parroquia......), de vivir despiertos y atentos, de ser valientes, de echar cables y, sobre todo, de tener en cuenta a los más desfavorecidos, que son muchos.

La Red Laical Compañía de María entra de lleno en cada uno de estos ámbitos de compromiso y lo haremos desde nuestra humilde disponibilidad y colaboración, unidos a tantas personas y colectivos que están y estarán actuando solidariamente.

Es un momento delicado......¿qué hacer y cómo hacer?

Esa será nuestra pregunta en estos tiempos en la vida de nuestros grupos Red Laical. Ser lúcidos y actuar.

Los grupos Red Laical Compañía de María somos grupos cristianos y apostólicos, abiertos al mensaje de Jesús, el Señor, en medio de la gran comunidad o Pueblo de Dios, con vocación de humanizar y cuidar los entornos en los que nos movemos.

Juana, es tiempo de responsabilidad, de Jueves Santo. Nos vienen en estos momentos las palabras de Francisco en su Exhortación Evangelii Gaudium: "Dios ha elegido convocarlos como Pueblo y no como seres aislados. Nadie se salva solo, esto es, ni como individuo aislado ni por sus propias fuerzas. Dios nos atrae teniendo en cuenta la compleja trama de relaciones interpersonales que supone la vida en una comunidad humana" (113).

Si tantas veces hemos comentado en nuestro grupo EREIN que estábamos en tiempos de cambio cultural, cambio incluso de época, tiempo de búsqueda, de cambio de paradigma, en este momento nos surgen nuevos cuestionamientos. Hay nuevos datos, nuevas realidades y nuevas brechas que las tenemos delante de nuestros ojos y de nuestro corazón.

Tú, Juana, conociste tiempos mucho más difíciles. Tiempos de peste generalizada. Sabes bien de qué te hablamos y sabes bien lo que queremos decirte cuando pensamos en poder "rescatar" a personas, familias.....que se pueden quedar en el camino de la pobreza, de la soledad y del desamparo.

Un abrazo, Juana, seguiremos caminando junto a los demás grupos de la Red Laical en medio de esta comunidad creyente y necesitada, llenos de esperanza en el Dios de Jesús, Dios de la misericordia.

Grupo EREIN (Red Laical Donostia-Irún)